viernes, 26 de diciembre de 2014

La Teoría de las inteligencias múltiples

En esta tercera entrada del blog se exponen los pilares de la propia teoría formulada por Gardner en 1983. En este modelo, lo que se propone es una visión de la inteligencia como un conjunto de inteligencias, todas ellas distintas y semi-independientes, alejándose de la concepción de esta como algo unitario. El propio Gardner define la inteligencia como la "capacidad mental de resolver problemas y/o elaborar productos que sean valiosos en una o más culturas", una definición que, a mi modo de ver, resulta bastante completa y adecuada, sobre todo por el detalle que dice "en una o más culturas".

Pues bien, a través de esta teoría el propio Gardner plantea que la brillantez académica no constituye la totalidad de lo necesario, ya que para afrontar la vida y los problemas y situaciones que de ella derivan no basta con tener un expediente académico excelso; esto se puede ver en muchas personas que, a pesar de contar con una gran capacidad intelectual, son incapaces de afrontar decisiones o situaciones que se le plantean a lo largo de su vida. Lo mismo ocurre a la inversa, puesto que hay gente que no suele destacar en su faceta académica pero posee una tremenda habilidad en otros ámbitos. Todo esto es debido a que en los distintos campos empleamos una inteligencia diferente, o varias.

Como segundo paso de la teoría, encontramos que Gardner la define como una habilidad. La inteligencia solía ser concebida como un elemento innato, esto es, algo con lo que se nace o no se nace, algo que ni siquiera la educación era capaz de desarrollar. Esto llegaba a tales límites que incluso se llegaba a no educar a los deficientes psíquicos al considerarse un esfuerzo inútil, cuando en realidad existe tanto una parte innata, es decir, ligada con la genética, y una parte adquirida, derivada del buen uso de la parte innata.

Como punto final, Gardner descubrió que cada persona se adaptará en mayor medida a unas inteligencias que a otras, y formuló que todos son capaces de conocer el mundo de 7 modos o formas distintas (8 incluyendo la inteligencia naturalista):


  • A través del lenguaje (inteligencia lingüístico-verbal).
  • Por medio del análisis lógico-matemático (inteligencia lógica-matemática).
  • Mediante la representación espacial (inteligencia espacial).
  • Por el pensamiento musical (inteligencia musical).
  • A través del uso del cuerpo para resolver problemas o hacer cosas (inteligencia corporal cinestésica).
  • Mediante una comprensión de los demás individuos (inteligencia interpersonal) o de nosotros mismos (inteligencia intrapersonal).
  • Por medio del análisis del entorno natural y sus elementos (inteligencia naturalista).

Así pues, cada persona desarrollará en mayor medida una(s) u otra(s) inteligencia(s), ya que atendiendo a los distintos subconjuntos que pueden conformar cada una de ellas, nos encontramos ante una infinita diversidad.

Finalmente, considero adecuado utilizar una frase a modo de reflexión y cierre de esta entrada, y es la siguiente: 'una persona no es más ni menos inteligente que otra, simplemente sus inteligencias pertenecen a campos diferentes'.

Ilustración de las distintas inteligencias

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